A fin de cubrir la demanda no atendida por los hospitales afectados por los sismos de 2017, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) desarrolló el Plan de Continuidad para la Prestación de Servicios Médicos, por el cual se demolerán tres hospitales con daños y se rehabilitarán siete unidades médicas.
Para ello, estableció una estrategia para recuperar a corto, mediano y largo plazo la capacidad de atención hospitalaria en Puebla, Morelos, Estado de México y Ciudad de México.